Luis Miguel Pascual. EFE – Era el duelo entre Lionel Messi y Antoine Griezmann, dos estrellas consolidadas del planeta fútbol, pero el Francia-Argentina fue el partido de Kylian Mbappé, el primer menor de 20 años que marcó en la fase del KO en un Mundial desde Pelé.
El día que Messi se marchó por la puerta trasera de su cuarto Mundial, que Griezmann tuvo otra actuación gris en su segundo, Mbappé emergió como una exhalación en su primero, tocado por el signo de los grandes.
El atacante del París Saint-Germain marcó un doblete decisivo en el 4-3 frente a la ‘albiceleste’ y reinó entre la constelación de estrellas que había en el terreno de juego, lo que le colocó en la órbita de jugadores que han marcado la historia del fútbol.
A sus 19 años y medio, volvió a demostrar que su eclosión no es ocasional y suma ya siete dianas con la camiseta ‘bleu’ que ha vestido solo en 19 partidos.
«Cuando un jugador así tiene una tarde como la de hoy es difícil de parar», reconoció el seleccionador Argentino, Jorge Sampaoli, que no dudó en admitir que sus carreras, veloces, pusieron en jaque a su defensa.
Ya había sido decisivo en el partido contra Perú, quizá el test más difícil que se había encontrado Francia en Rusia, resuelto con un tanto del atacante que les dio el pase matemático a octavos de final.
Frente a Argentina fue también letal. Provocó el penalti que permitió a Griezmann abrir el marcador -es su segundo gol en Rusia y ambos de pena máxima- y cuando el partido aparecía equilibrado después de que su compañero Benjamin Pavard lo igualara, marcó la diferencia con dos tantos llenos de clase.
Pero más allá de los tantos, fue una amenaza constante a la zaga argentina, mortificada con sus carreras plenas de velocidad y potencia que, una y otra vez, les pusieron en jaque.
El seleccionador galo, Didier Deschamps, que en alguna ocasión le ha pedido que se sacrifique más por la defensa, se deshizo hoy en elogios a su precoz estrella.
«Adora el fútbol, lo conoce todo. Estoy contento de que sea francés. Tiene mucho margen de progresión, pero en un partido tan importante ha mostrado todo su talento. Y aunque ha tenido que defender, eso no le ha impedido atacar y hacerlo muy bien», señaló.
Enseguida, el jugador comenzó a ser comparado con estrellas del olimpo. La más clara, con Pelé, a quien igualó como doble goleador de menos de 20 años en partidos a eliminación directa, algo que ‘O Rei’ hizo en la final del mundial de 1958 contra la anfitriona Suecia.
«Es halagador, pero hay que poner las cosas en contexto. Pelé es otra categoría, pero estoy contento de entrar en la lista de jugadores que han marcado dos tantos en este tipo de partidos», señaló.
Además, se convirtió en el jugador más joven en lograr un doblete desde que lo hiciera Michael Owen en 1998 con 18 años y medio.
Fue el año que nació Mbappé, el mismo en el que Francia, que ahora le adula, ganó su único Mundial, en una final en la que se midieron a Brasil, donde jugaba Ronaldo Nazario de Lima, otro jugador con el que le comparan.
«No es el mismo tipo de jugador, Ronaldo jugaba por el centro y era capaz de enormes aceleraciones con el balón en el pie. Kylian corre más deprisa, necesita más espacios. Aunque puede jugar de 9, suele ir más a la banda. Estamos comparando a un campeón del mundo con un jugador lleno de calidad pero de 19 años. Va a progresar mucho», aseguró Deschamps.
«Creo que la gente se acuerda más de la victoria de Francia que de mi nacimiento», bromeó el futbolista, encantado de haber podido brillar «en un Mundial, donde están todos los grandes, el mejor lugar donde puedes mostrar tus cualidades».
Mbappé tiene ya cuatro tantos en su casillero, algo que con menos de 20 años solo han logrado dos futbolistas, el propio Pelé, que tenía ya 6 cuando se convirtió en veinteañero y el alemán Edmund Conen, que los cumplió con 4.