Jesús A. Sáez S. San Cristóbal.- Con los pelos de punta, este viernes Venezuela disputa su último partido de las Eliminatorias Brasil 2014. Los dirigidos por Cesar Farías están obligados a golear a su similar de Paraguay y esperar sentados los malos resultados de Uruguay, selección que actualmente ocupa el puesto de repechaje.
Aún las esperanzas de ir al Mundial se mantienen vivas, pero con cierto nerviosismo, debido que hasta la fecha no se ha logrado asegurar por lo menos el puesto de repechaje que actualmente lo ocupa la “Celeste”, luego de que se adueñara de la quinta casilla después de su reciente victoria.
Muchos cuestionan que se escaparon los puntos en casa, otros que es debido al mal manejo del Director Técnico Cesar Farías, dichos señalamientos habrán que dejarlos a un lado en esta fecha. Lo que se debe aprovechar es el mal momento que vive Paraguay, selección que está fuera de la máxima cita del balompié universal, significando un duro golpe para ellos.
A pesar de que Venezuela sufre las sensibles bajas de Salomón Rondón, Tomás Rincón, Cesar «Maestrico» González, Luis Manuel Seijas y Rolf Feltscher (todos por lesión), existen variantes que dan el visto bueno para ocupar esos puestos, como lo es Josef Martínez, jugador que ha tenido un buen desempeño en su actual club, el Thun de Suiza, donde activó la marca goleadora en Europa.
Otra pieza importante que posiblemente salga en el once titular es la del volante del Caracas FC, Rómulo Otero, seguramente tomará el papel de acompañar a Juan Arango en la creación y se encargará de ejecutar las jugadas de balón parado del perfil derecho, estrategia que vienen ensayando desde algún tiempo.
Por su parte, Franklin Lucena sería el único en la recuperación, prueba que de seguro sabrá cómo enfrentar. Más atrás, en la zaga vinotinto estaría conformada por Alexander González, Oswaldo Vizcarrondo, Fernando Amorebieta y Roberto Rosales, la cual ya fue probada en el último cotejo con Perú en Puerto La Cruz.
No sólo Venezuela pierde a sus principales jugadores, Paraguay no contará con Darío Verón, jugador de los Pumas de la UNAM en la liga mexicana, su reemplazo es José Leonardo Cáceres. Christian Rivero está en duda por una contractura que actualmente padece.
La última vez que se vieron las caras fue la Asunción, aquella noche de gloria cuando Venezuela venció 0-2 con doblete del «Gladiador» Salomón Rondón. Asimismo, en la última visita de los guaraníes a suelo criollo salieron victoriosos con un 1-2 en Puerto Ordaz, resultado que sacó a los criollos de la lucha por un cupo a Sudáfrica 2010.
En estos momentos la Vinotinto no está sólo obligada a ganar por goleada, sino que deberán cruzar los dedos para que Uruguay tenga par de reveses con un marcador de 2-0 y 0-2, contra Ecuador en Quito y Argentina en el Centenario, respectivamente; de no ocurrir esto el sueño se esfumará, una vez más cuando las posibilidades estaban latentes para la clasificación a un mundial.
Ante la posibilidad de pellizcar un buen resultado, la afición tachirense se unió al llamado de los vinotintos para que asistan al partido, pues el calor humano del venezolano es la principal arma que pondrá a los visitantes contra la pared. La voz de mandó es alentar hasta el último minuto del partido.
Por otra parte, Farías deberá manejar la presión de una afición exigente, acostumbrada a buenos resultados, de lo contrario se puede repetir lo que alguna vez sucedió con Richard Páez cuando precisamente abandonó el mandó de la selección unos meses después de recibir fuertes críticas desde las gradas de Pueblo Nuevo en el 2007. Aún se desconoce si luego del compromiso deja la dirección técnica.
Pero ahora sólo existe una esperanza y está es la última que se pierde, todos pones sus fuerzas en ese respiro que queda.