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AP – El presidente de la FIFA, Gianni Infantino, advirtió el lunes en Paraguay que habrá «tolerancia cero» para los corruptos en el fútbol.
Al iniciar una gira por Sudamérica, una de las regiones más golpeadas por el escándalo de corrupción de la FIFA, Infantino dijo que «actualmente estamos haciendo profundas reformas y queremos que eso llegue a la Conmebol y a otras confederaciones».
«No podemos cambiar la historia, pero podemos ayudar a mejorar el futuro», sostuvo Infantino en una rueda de prensa en la capital paraguaya.
El dirigente suizo fue elegido en el cargo el mes pasado y el bloque sudamericano, de 10 países, fue uno de sus pilares para salir triunfante.
Infantino se reunió con el titular de la Conmebol, Alejandro Domínguez, y luego fue recibido por el mandatario paraguayo Horacio Cartes.
Añadió que en un mes y medio, la FIFA realizará un congreso en la Ciudad de México, y «allí presentaremos un presupuesto de 1.400 millones de euros para desarrollar el fútbol en todo el mundo».
Pero prometió que la FIFA manejará los recursos con transparencia y buen gobierno: «si alguien no hace bien las cosas, habrá tolerancia cero», acotó. «Si alguien cometió un crimen es normal y está bien que las autoridades vayan por él. Pero en fútbol debemos gestionarlo, dentro de la ley».
Reiteró que la FIFA solicitó a las autoridades judiciales de Estados Unidos que, cuando terminen los juicios a los dirigentes y empresarios involucrados en hechos de corrupción, el dinero repartido en sobornos sea devuelto a las arcas del organismo regente del fútbol mundial. «Que ese dinero vuelva a la FIFA, no es dinero de los Estados Unidos», destacó Infantino.
«Ese dinero es del fútbol y nos pondríamos de acuerdo para que ese dinero recuperado vaya al lugar en donde el daño ocurrió. Sudamérica es uno de los continentes en donde una buena parte de ese dinero iría».
Fondos desbloqueados
Infantino anunció que en poco tiempo se desbloquearán los fondos tanto para la Conmebol como la Concacaf.
A inicios de febrero, la FIFA suspendió «hasta nuevo aviso» la financiación de las dos confederaciones del continente americano, ambas afectadas por los escándalos de sobornos y corrupción.
La FIFA dijo entonces que analizaba nuevas medidas que deberán adoptarse para aumentar el nivel de seguridad en los manejos de los fondos. «En Conmebol estamos al tanto de que el presidente Alejandro Domínguez está recuperando la confianza y además hay auditorías», indicó Infantino.
Al ser consultado sobre su sueldo como titular de la FIFA, respondió: «un informe de auditoría publicado el año pasado dijo que el salario del entonces presidente (Joseph Blatter) era de 3.600.000 dólares anuales».
«Ahora tengo una referencia como para pedirle al comité ejecutivo una remuneración que no sé cuánto será pero cuando esté establecida se informará, pero aclaro que soy una persona amante del fútbol y no llegué a FIFA por el salario», aseguró.
Domínguez, por su lado, afirmó que está terminando «una auditoría a cargo de una empresa privada acerca de las remuneraciones en la anterior administración de Conmebol. Cuando tenga a mano el resultado tomaré una decisión de cuánto puedo pedir al comité ejecutivo que se me pague como salario. Es justo que toda persona que trabaja gane su dinero».
Respecto a la situación del presidente del fútbol brasileño Marco Polo del Nero, acusado por las autoridades estadounidenses de hechos de corrupción, Infantino explicó: «Del Nero renunció a todos sus cargos en FIFA».
«Conmebol designó en su reemplazo a Fernando Sarney, vicepresidente de la Confederación Brasileña de Fútbol. Esperamos que los dirigentes brasileños solucionen sus problemas, así como lo hacen otras asociaciones nacionales», indicó.
«Brasil es muy grande en fútbol y sabrá salir de sus problemas». Según informó la Conmebol, Infantino viajará el martes a Uruguay y posteriormente se dirigirá a Bolivia y Colombia.
