GradaDigital.com Fútbol más cerca de ti
Addrix Delgado – El Carabobo Fútbol Club se reencontró con el sendero de las alegrías y, pese a que no pudo celebrar sus 18 aniversarios con los tres puntos, logró levantar cabeza para cerrar de forma positiva una semana en la que consiguió siete unidades de nueve posibles.
La festividad y el colorido del cumpleaños de la institución granate adornaron al Polideportivo Misael Delgado para lo que fue el choque entre carabobeños y tachirenses que culminó con la paridad (1-1) en el marcador.
Sin embargo, para el análisis del cuerpo técnico el resultado fue más agrio que dulce, pues “sumamos pero no era lo que queríamos, queríamos ganar en nuestro campo, en el aniversario del club y con el ambiente que había te invitaba a querer los tres puntos. Para nosotros es amargo el empate con Táchira, como lo fue la derrota con Tucanes o con Petare”, indicó Jhonny Ferreira, director técnico del elenco valenciano.
“Queríamos sumar de a tres y así buscamos todos los partidos, pero bueno se suma contra un gran rival, una gran nómina y un gran cuerpo técnico liderado por Daniel (Farías)”, agregó
Asimismo, el encuentro estuvo lleno de intensidad con oportunidades para ambos bandos. Los aurinegros querían apoderarse de los tres puntos en el “Gigante de la Bolívar” mientras que los carabobeños buscaron celebrar a lo alto, no obstante, tuvieron que conformarse con la repartición de puntos.
“Referenciamos muy bien los elementos de Táchira, que es un equipo que está muy bien trabajado por Daniel (Farías) y que tiene una serie de jugadores experimentados que pudimos controlar. Ya era el cuarto partido que enfrentábamos contra Táchira en el año, los teníamos bastante analizados pero nos queda un sabor amargo porque queríamos los tres puntos para acercarnos un poco más arriba”, señaló Ferreira.
Los aurinegros se adelantaron en el marcador a la hora de juego, no obstante, el estratega granate modificó sus piezas y apostó por un planteamiento más ofensivo para buscar emparejar y darle vuelta a la pizarra. Ferreira permitió el ingreso del juvenil Eduard Bello y Jesús Quintero tres minutos después.
“Cuando nos ponemos a perder 0-1 arriesgamos un poco y retrocedimos a Diego García en su posición habitual del 4-3-3, colocamos al “Piojo” Quintero y pasamos a (Aquiles) Ocanto, que estaba jugando de atacante acompañando a (Cristián) Alessandrini, a que fuese por fuera a encarar a Gerzon (Chacón), y (Eduard) Bello en el otro costado. Gracias a Dios se dieron dos jugadas importantes, la primera que no logra concretar Bello y la segunda en la que terminamos consiguiendo el punto”, explicó el timonel.
“Cuando trabajas el fútbol te apremia”
El ingreso de Bello no fue meramente por la regla juvenil, pues el estratega buscó revertir el partido y vio en él la llave para abrir la puerta del contrario, producto de un trabajo de base que se viene trabajando y consolidando desde la llegada del director técnico industrial.
“Hoy por hoy, juveniles como Gustavo Gonzáles y Eduard Bello son parte del plantel. Bello entra perdiendo 0-1 a tratar de resolver partido y se le dio. Hemos hecho un trabajo importante en categorías menores que hoy por hoy tienen trabajo acumulado y que cuando son citados te pueden brindar cosas como estas. Cuando trabajas el fútbol te premia la vida y en Bello hay todo un trabajo acumulado que hoy se termina valorando con un gol”, expresó.
El cuerpo técnico ya piensa en la planificación de la semana para encarar su próximo compromiso. “Hay que recuperar a los futbolistas, venimos de una semana en la que jugamos tres partidos. El tiempo libre para los jugadores, que son necesarios, para nosotros son de análisis con el rival; ya tenemos unas herramientas sobre el Zulia y hay que saber la importancia que ellos tienen jugando en el “Pachencho” Romero”.
“Estamos tranquilos, conscientes de que vamos a jugar un partido muy bravo pero ahora en Maracaibo y con la intención de seguir sumando”, sentenció Jhonny Ferreira.
La mira se pone ahora en Maracaibo, el Carabobo FC visitará al Zulia FC en buscar de estampar su sello en el “Pachencho” Romero, pues el objetivo es seguir sumando sin importar el rival o la condición.
