René Rincón – Jhonattan Vegas inicia mañana su participación en Río 2016 en lo que representará el regreso del golf a los Juegos Olímpicos luego de 112 años de ausencia. Esta disciplina deportiva solo había estado presente en dos citas olímpicas, las ediciones de París 1900 y St. Louis 1904. El sorteo de salida determinó que el monaguense iniciará su recorrido a las 10:58 am Hora de Brasil (9:58 am Hora de Venezuela), acompañado por el estadounidense Rickie Fowler y el británico Justin Rose.
El evento se realizará en un campo de 18 hoyos diseñado por el arquitecto estadounidense Gil Hanse y Amy Alcott, (jugadora perteneciente al Salón de la Fama del LPGA Tour), ubicado en la Reserva Natural de Marapendi, un parque natural de vegetación y fauna en peligro de extinción situado al oeste de Río de janeiro. El torneo masculino se jugará los días 11, 12, 13 y 14 de agosto, con la participación de 60 bastonistas, bajo el formato similar al de un torneo del PGA Tour, en un sistema por golpes de 72 hoyos, a razón de 18 diarios.
“El pasado lunes fue el primer día que pude ver el campo y noté que es muy exigente, donde sopla mucho el viento y los ‘greenes’ son muy complicados debido a que son sumamente pequeños. Considero que la precisión será uno de los puntos más importantes durante esta semana. Este campo está prácticamente dentro de una reserva natural y por lo tanto hay mucha agua y áreas que se deben evitar. Me siento física y mentalmente bien y sobretodo contentísimo de representar a Venezuela”, dijo el criollo con respecto a las condiciones del campo.
En referencia a su primera participación en unas olimpiadas, Vegas señaló: “Esta ha sido una semana espectacular ya que para todo atleta el hecho de poder representar a su país en unos Juegos Olímpicos es algo único y especial. Aquí me encuentro representando los colores de Venezuela en un evento de gran magnitud y en consecuencia debo dejar atrás la parte personal y enfocarme en mi país. La experiencia de participar en el desfile inaugural y compartir con los otros miembros de nuestra selección en la villa olímpica ha sido algo prácticamente indescriptible”.