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GradaDigital.com, Barinas – Tras finalizar el encuentro entre el Zamora FC y el Deportivo Anzoátegui, correspondiente al partido de vuelta de la Gran Final del Torneo Apertura 2016, se presentaron incidentes en el campo de juego tras la invasión de aficionados barineses que deseaban festejar con el plantel campeón.
Días antes del cotejo, se estipuló un operativo especial que contemplaría 500 efectivos entre Policía Municipal, Estadal, Guardia Nacional y Protección Civil para dicho encuentro, sin embargo no fue suficiente para garantizar de manera correcta la seguridad del evento, de los aficionados que se hicieron presente, e incluso de los jugadores, personal de trabajo y periodistas que también se vieron afectados.
Efectivamente, los aficionados no deben saltar al campo de juego, como siempre es anunciado en los altavoces del estadio donde se disputa este tipo de eventos, pero las emociones pudieron más con los impulsos de los presentes, quienes ingresaron al terreno tras la obtención del título por parte del Zamora FC. Muchos cargaron a jugadores como Pedro Ramírez y Yeferson Soteldo. Otros corearon el nombre del actual estratega Francesco Stifano, pero todo duró muy poco tiempo ya que los presentes fueron reprimidos por los entes encargados de otorgar seguridad en el recinto. Dichas acciones no fueron cautelosas, pues entre el humo de las bombas lacrimógenas, incluso algunos perdigones, no solo se vieron afectado los aficionados, sino incluso los mismos jugadores que debieron ingresar a los camerinos. Periodistas encargados de llevar la información también sufrieron el accionar de los efectivos.
Esperamos que sea un hecho que quede en el recuerdo, no vuelva a repetirse por el bien del fútbol venezolano, sus aficionados, y grupo de trabajo que en pro del torneo nacional sufre dichas consecuencias, y sirva como lección para que el resguardo y bienestar de todos los actores se efectúe de la manera adecuada.
