Rubén Figueroa. EFE – Uruguay, dominador histórico de la Copa América con quince entorchados, comienza la competición a la espera de la pronta recuperación de Luis Suárez, quien padece una lesión muscular que le impedirá jugar los primeros partidos, para pelear por el título en las instancias decisivas del torneo.
El delantero del Barcelona sufrió un inoportuno percance muscular en su pierna derecha en la final de la Copa del Rey de España que le obliga a estar casi tres semanas de baja.
El futbolista ha iniciado la recuperación en Barcelona y se incorporará a partir del 1 de junio a la concentración de su equipo en Estados Unidos.
Con 59 goles en 52 partidos, cuarenta de ellos en la liga española que le han valido para conseguir su segunda Bota de Oro, las estadísticas del salteño nunca antes fueron mejores y su brío convierte automáticamente a Uruguay en uno de los máximos favoritos al título.
Pero como ocurriera en el Mundial de Brasil 2014, al que llegó lesionado y no entró en juego hasta la segunda jornada del grupo, en Estados Unidos no se espera su participación antes del compromiso ante Jamaica del 13 de junio que cierra la fase inicial.
Consciente de la expectativa que genera lo que puede lograr Uruguay con Suárez es el seleccionador nacional, Óscar Washington Tabárez, quien en el inicio de la concentración elogió la temporada del atacante del Barça pero reiteró que el fútbol es un deporte colectivo.
«Jamás le daríamos (a Suárez) la responsabilidad de hacer creer a nadie que viene para sacarnos campeones», aseveró el míster.
En un sentido similar se expresó el lateral izquierdo del Getafe Álvaro Pereira al decir que «ni con la camiseta ni con los nombres se gana a nadie».
La figura de Suárez ha dejado en un segundo plano el debate de la renovación de Uruguay, que tras conquistar el cuarto puesto en el Mundial de 2010 y el trofeo de la Copa América de 2011 quiere consolidar otro plantel ganador.
En ese proceso destaca principalmente la inclusión para esta Copa del volante de la Fiorentina Matías Vecino, que cumplirá 25 años en agosto y que se mantuvo inédito con la absoluta hasta que fue convocado por primera vez para las dos últimas jornadas de eliminatorias mundialistas.
El centrocampista del Middlesbrough Gastón Ramírez, ausente en un gran campeonato desde el Mundial de 2014, y el experimentado defensa Mauricio Victorino, del Nacional uruguayo, presente en Suráfrica 2010 y en la Copa América de 2011, pero fuera en grandes torneos desde entonces, son las otras dos grandes novedades.
Además de la inclusión a última hora de Gastón Silva, del Torino italiano, para sustituir la baja del lesionado Sebastián Coates, del Sporting de Lisboa portugués.
Vecino refrescará una banda izquierda para la que Tabárez también confía en el veterano Cristián ‘Cebolla’ Rodríguez, del Independiente argentino, en un centro del campo que estará comandado, de nuevo, por el incombustible Egidio Arévalo Ríos, del Atlas mexicano.
Su compañero de club en México Álvaro González está destinado a ocupar la otra plaza en la medular, al menos hasta ver cómo responde Nicolás Lodeiro, del Boca Juniors, convocado pese a su reciente operación de menisco, de la que ultima su recuperación.
El volante derecho es para Carlos Sánchez, del Monterrey mexicano, y en la delantera Edinson Cavani, del Paris Saint Germain, hará pareja con Suárez cuando éste se recupere.
Entretanto, Diego Rolán, del Girondins de Burdeos, Abel Hernández, del Hull City, y Cristhian Stuani, del Middlesbrough, serán las opciones de ataque del ‘Maestro’ Tabárez para suplir a Suárez.
En la portería es segura la presencia del arquero del Galatasaray Fernando Muslera, resguardado por Maxi Pereira, del Oporto, en el lateral derecho, y Álvaro Pereira en el izquierdo, con los dos centrales del Atlético de Madrid, Diego Godín -capitán del grupo- y José María Giménez al frente de la zaga.
Uruguay integra el Grupo C de la Copa América Centenario, junto a Jamaica, México y Venezuela.
De la Vinotinto, el rival que más conoce Tabárez, el ‘Maestro’ advirtió que se trata de un grupo de jugadores jóvenes que hacen que sea «un equipo de cuidado»; mientras que de Jamaica recordó que no fue fácil ganarle en la Copa América de Chile del año pasado.