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Javier Joves / Prensa Deportivo Táchira – La semana comenzó bastante movida para el Carrusel Aurinegro, con su expedición hasta Ecuador por compromiso de Copa Bridgestone Libertadores 2016. En Guayaquil, capital económica del país meridional, está el Deportivo Táchira F.C. con la bandera de Venezuela como estandarte y la intención de escribir otra nueva historia de decibeles internacionales como premisa.
La alegría que redunda en el ambiente después de dos triunfos en una misma semana, ante Club Olimpia de Paraguay (2-1) y el vecino Ureña S.C. (0-2), armoniza la concentración aurinegra y respalda la motivación para afrontar un nuevo ciclo que exige el largo traslado por la frontera con escala en Bogotá – Colombia.
Con una delegación de 20 jugadores y su multidisciplinario cuerpo técnico, Carlos Maldonado y los suyos se trasladaron hasta la costera Guayaquil para medir fuerzas ante el S.C. Emelec, en el compromiso de la segunda jornada del Grupo 7 del certamen más importante del continente y con presencia de los grandes de Sudamérica.
El enfrentamiento entre azules ecuatorianos y Aurinegros venezolanos, está pautado para este jueves 25 de febrero a las 7:45 de la noche (8:15 de Venezuela), en el Estadio Reales Tamarindo de Portoviejo, sede alternativa que ha dispuesto el local por la remodelación de su habitual estadio.
El Carrusel permanecerá en movimiento
La estadía del Campeón de Venezuela en Ecuador se divide en escalas con una agenda exigente y detallada. El martes permanecerá en Guayaquil para trabajar al final de la tarde en el Estadio Monumental. Ya en la mañana a cargo del preparador físico, Rudy Marques, el plantel se activó en el gimnasio del hotel de concentración.
El itinerario del miércoles, además de las actividades de gimnasio, la tropa criolla recorrerá unas tres horas hasta Portoviejo, allí reconocerá el gramado del Estadio Reales Tamarindo de Portoviejo, en horario nocturno similar al oficial del choque. Al finalizar, el ocho veces campeón de Venezuela se hospedará en Manta, población costera a escasos minutos del escenario copero.
El jueves, la concentración plena prevalecerá durante todo el día, para trasladarse con el tiempo prudente hasta el recinto deportivo donde se buscará escribir una nueva historia victoriosa desde las 8.15 de Venezuela, bajo el arbitraje del árbitro boliviano Raúl Orosco.
